MANUEL URBANO PÉREZ ORTEGA |
Siempre
recordaré al hombre y al poeta que habitaba en él, en su mirada límpida y
serena, ese temblor de la palabra justa y segura que nace del amor y la
fraternidad humanas y confluía en Manuel Urbano. «Aguijo la mirada, tomo las gafas, y el
memorial del fracaso se ofrece: recuento y cuento tanta ausente presencia, las
huelas heridas, las lágrimas aprisionadas en la profundidad oceánica del
espejo. Imposible la poesía sin esa anécdota de la que nace el dolor, por
siempre plural y alguna vez compartido, cosas que recordar no quiero», escribe
el poeta Manuel Urbano (Alcalá la Real, 1940-Jaén, 2013) en su poema
“Confieso”, perteneciente al libro “Camino de la nieve”, que el crítico Juan
Carlos Abril analiza, también, como
personal aportación en este libro homenaje a la figura del polígrafo giennense
Manuel Urbano. Entre los estudios de la obra poética del poeta giennense cabe
destacar el realizado por el también poeta y doctor en Filología Hispánica José
Cabrera, Javier Cano, Antonio Chicharro,
Juan Manuel Molina Damiani, Francisco Morales Lomas, Dionisio Pérez Venegas, Pilar Quirosa-Cheyrouze, José Román Grima y de
Fanny Rubio. En la parte segunda “Evocaciones y semblanzas” participan profesores,
poetas, artistas y críticos: José María Barrera, Antonio Carvajal, Salvador
Compán, Antonio Checa Lechuga, Rosa Díaz,
Juan Espejo González, Manuel
Gahete, Guillermo González, Antonio Hernández, Francisco Silvera, Francisco
Vélez Nieto o Miguel Viribay. En el aparado “Creación” participan los poetas
Francisco Acuyo, Rosaura Álvarez, José Cabrera Martos, Francisco Castaño,
Rafael de Cózar, Francisco Domene, Paloma Fernández Gomá, Tomás Hernández,,
Rafael Juárez, Dolores Montijano, Jesús Munárriz, Belén Núñez, Manuel Ruiz
Amezcua, Francisco Ruiz Noguera, José Antonio Santano, José Sarria, María del
Valle Rubio, y en narrativa, Aliana Gómez Gray y Fernando de Villena. En el
apartado de ilustraciones, existen las propias referentes a Manuel Urbano y
otras de autores como Antonio Blanca,
Víctor Ceprián, Luis Flores, Mar Garrido, Antonio Hervás, Julio Juste, Manuel
Kayser, Marite Martín-Vivaldi, Francisco Molinero, José Olivares, Cristina
Pérez Gabrielli, José Rodríguez Gabucio, Sebastián Rosales y Carmelo Trenado.
Una extensa nómina de personas allegadas al poeta y amigo de sus amigos
siempre, que pudieron comprobar la humanidad y nobleza de uno de los más
grandes de la literatura española de finales del s. XX y primeros del XXI.
Hombre y poeta, ensayista, antropólogo y flamencólogo que bebió de la cultura
popular, que se adentró en el laberinto de esencia para trascenderla,
difundirla a la colectividad, asumirla como propia hasta crear una voz singular
y única, abarcadora del paisaje (extensísimo campos de olivares y olivares) y
el paisanaje, mestizaje que siempre llevó a gala. “Fruto del tiempo con
nosotros” es un libro imprescindible para acercarse a la figura del polígrafo
Manuel Urbano, un libro en el cual la literatura es el germen, principio y fin
en sí mismo, como la vida misma. Este merecido homenaje a Manuel Urbano no es sino el principio para una mayor
dedicación a su obra, inmenso legado, que habrá que reunir para las
generaciones venideras, propiciando así un acercamiento definitivo al hombre,
al humanista, poeta, flamencólogo y erudito que fue Manuel Urbano. Testimonia
Antonio Carvajal: «Ahí está su obra. Aquí lo tenemos de cuerpo presente, pero
ya sin poderle dar el abrazo con que siempre nos saludábamos.
Está en el camino de la nieve última, mientras intento mirar las fotos del día de su boda con Nieves para que no se nos olviden las alegrías compartidas. Lo diré con palabras suyas: «un recuerdo que alberga otro recuerdo» y, sobre todo, el de la entera verdad con que, camino de Baeza, nos anunció su aceptado final». Hago mías, en su recuerdo imborrable, las palabras del también poeta Manuel Gahete cuando dice: «Aprendo de ti, amigo, y el deseo de emularte no es más que lógico resultado de mi imperturbable admiración». Siempre vivo en la memoria el hombre y el polígrafo Manuel Urbano.
Está en el camino de la nieve última, mientras intento mirar las fotos del día de su boda con Nieves para que no se nos olviden las alegrías compartidas. Lo diré con palabras suyas: «un recuerdo que alberga otro recuerdo» y, sobre todo, el de la entera verdad con que, camino de Baeza, nos anunció su aceptado final». Hago mías, en su recuerdo imborrable, las palabras del también poeta Manuel Gahete cuando dice: «Aprendo de ti, amigo, y el deseo de emularte no es más que lógico resultado de mi imperturbable admiración». Siempre vivo en la memoria el hombre y el polígrafo Manuel Urbano.
Título:
Fruto del tiempo con nosotros
Autores: Varios
Coordinador: José Cabrera
Edita: Diputación de Jaén.
Instituto de
Estudios Giennenses 2015