SALÓN
DE LECTURA _____________________ José Antonio Santano
UNA
VERDAD EXTRAÑA. (POESÍA 1974-2018)
Si
de aconsejar se tratara y teniendo en cuenta la falta de rigor con el
que nos sorprenden algunos escaparates de la literatura española
actual, no sería complicado dar con una relación suficiente de
títulos para esta etapa veraniega, en la que, poco a poco, se va
asentando la costumbre de leer, aunque sean, en su mayoría, libros
insustanciales con los que las grandes editoriales, llevadas por el
más puro sentido mercantilista (promociones salvajes en radio,
prensa y televisión), seducen a los eventuales lectores. Para esta
ocasión, la recomendación, atendiendo al exclusivo sello de
calidad, tendrá su plasmación en un libro que, con toda seguridad
no defraudará al lector de poesía, sea principiante o ya avezado en
la materia. Se trata de la segunda edición de la obra corregida y
aumentada “Una verdad extraña (Poesía 1974-2018)”, del poeta de
Jódar (Jaén), Manuel Ruiz Amezcua, cuyo estudio, de casi 200
páginas, ha corrido a cargo del profesor de Literatura Española, en
la Universidad de Sevilla, Carlos Peinado Elliot. Queda publicada
así, en un esfuerzo ingente por parte del sello editorial Comares,
la obra completa –hasta ahora-, corregida y aumentada del poeta
Manuel Ruiz Amezcua. Si nos atuviéramos a algunas de las opiniones
versadas sobre la trayectoria y la voz poética de Ruiz Amezcua,
tendríamos que detenernos, obligatoriamente, en la de su paisano
Antonio Muñoz Molina, cuando dice: «Manuel Ruiz Amezcua ha
realizado una carrera literaria tan tenaz y rigurosa como desasistida
de cualquier clase de reconocimiento público. Va siendo hora de que
sea escuchado.
Es dueño de una voz y de una obra poética que deben
ocupar cuanto antes el sitio que les corresponde en el repertorio
público de nuestra literatura», y también, por resumir dado el
gran número de críticos y poetas que han reseñado la obra de Ruiz
Amezcua, la del premio Nobel, José Saramago, que llegó a escribir:
«Una novela nunca da la sensación de poder levantar el mundo. La
poesía sí. Como esta de Ruiz Amezcua». Dos opiniones
suficientemente relevantes, sin quitar importancia a otras que no han
sino reconocer el trabajo y la calidad poética de la obra de Ruiz
Amezcua. En este volumen, “Una verdad extraña”, Carlos Peinado
Elliot recorre de principio a fin la obra de Ruiz Amezcua contenida
en sus más de 800 páginas, y lo hace desde el análisis y la
reflexión profunda, ahondando en aquellos elementos propios y
caracterizadores de su poética, olvidada y silenciada durante un
tiempo en el que la poesía era concebida como un club de amigos al
que solo podían pertenecer algunos elegidos, y no precisamente por
su calidad y su aportación a la poesía del siglo XX, sino por la
relación más o menos interesada de amistad o, en su defecto,
política. Fueron aquellos, años de sequía para la poesía
española, en la que solo cabía una única tendencia, una corriente
que lo absorbía todo, incluido el sector editorial. En estas
circunstancias, “la otra poesía” no tenía cabida, fue denostada
o en el mejor de los casos silenciada. A esa “otra poesía”
pertenecía por derecho propio Ruiz Amezcua, porque tampoco quiso
nunca que le relacionaran con la moda poética de aquellos años, tan
laxa y plana para él. Hubo de pasar el tiempo, de sucederse los años
para que viniera el reconocimiento a su trabajo poético, como ahora
se puede constatar en este libro. «La revelación del mal y de la
injusticia», está en el origen de su poesía, y añade el propio
autor: «Las palabras también consuelan. Y redimen. La poesía
duele, pero siempre cura. Hay marcas que no se borran y las palabras
nos sirven para convertirlas en un mundo distinto, en un viaje
distinto. Un viaje de por vida. Un viaje al fin de la noche buscando
la claridad del día». En esto consiste el hecho mágico de
descubrir la luz en la oscuridad misma, un viaje al interior del
silencio y capaz de revelar la luz es el acto poético por
excelencia, la esencia de la poesía en su camino hacia la
transformación del mundo (interior y exterior), en el cual el ser
humano es el centro. Claro que la poesía redime y sana, ese ha sido
siempre el principio motor de Ruiz Amezcua que, aún frente a las
vicisitudes y obstáculos que se interpusieron en su camino, siempre
supo cuál era el camino. En esa lucha del hombre con el mundo
siempre estuvo Ruiz Amezcua, con la palabra exacta, el lenguaje
preciso que sangra por las venas del poeta hasta convertir lo vivido
en el único edén posible. Todo esto y más hallamos en la poesía
de Ruiz Amezcua que parte de “Humana raíz”(1974) y llega hasta
“Palabras clandestinas” (2015), con el añadido de algunos poemas
inéditos. Un trabajo de análisis recogido en casi 150 páginas
escritas por el profesor Carlos Peinado, desde la objetividad del
conocimiento de su poesía y con la brillantez de su palabra y
pensamiento, para quien la obra del poeta es un continuo descender a
uno mismo para rebelarse luego ferozmente contra sí mismo. “Una
verdad extraña (Poesía 1974-2018)” contiene lo mejor del gran
poeta que es Ruiz Amezcua, que es como decir de lo mejor del panorama
actual de la poesía española.
Título:
Una verdad extraña
(Poesía 1974-2018)
Autor:
Manuel Ruiz Amezcua
Edita:
Comares (Granada, 2018)